La luz clara de la mente se engendra a sí misma y, desde un principio, no ha nacido jamás. Aunque es hija de Rigpa, nunca ha tenido padres.

Esta sabiduría autooriginada no ha sido creada por nadie; nunca ha nacido ni hay nada en ella que pueda causarle la muerte.

Es visible y, sin embargo, nadie la ha podido ver. Ha vagado por el Samsara y no ha sufrido daño alguno. Ha visto la Budeidad y no se ha beneficiado con ella.

Está en todos los seres y nadie la ha reconocido. Y aunque la poseemos como nuestro elemento más esencial… ¡andamos buscándola en otra parte!

Palabras de Padmasambhava Tomadas del Libro tibetano de la vida y de la muerte
de Sogyal Rimpoché